VACUMTERAPIA
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La vacumterapia, también conocida como terapia de vacío, puede tener varios beneficios estéticos y terapéuticos. Aunque los resultados pueden variar según la persona, aquí algunos de los beneficios potenciales:
Reducción de Celulitis: La vacumterapia puede ayudar a romper los depósitos de grasa y mejorar la apariencia de la celulitis al estimular la circulación sanguínea.
Mejora de la Elasticidad Cutánea: Al favorecer el flujo sanguíneo y la producción de colágeno, la vacumterapia puede contribuir a una piel más firme y elástica.
Estimulación del Sistema Linfático: Ayuda en la eliminación de toxinas al activar el sistema linfático, contribuyendo así a la desinflamación y reducción de retención de líquidos.
Modelado Corporal: Puede ayudar en la reducción de medidas y remodelación de áreas específicas del cuerpo.
La cantidad de sesiones recomendadas puede variar según diversos factores, incluyendo los objetivos del tratamiento, el estado de la piel y la respuesta individual al procedimiento. Por lo general, se recomienda un curso de varias sesiones para obtener resultados más notables. Sin embargo, la frecuencia y el número exacto de sesiones dependerán de la evaluación del profesional.
Posteriormente de la sesión por la zona localizada se realiza un drenaje linfático, para facilitar la eliminación de las células grasas y evitar que se reabsorban de nuevo.
La vacumterapia, aunque es un tratamiento relativamente seguro, puede tener contraindicaciones en ciertos casos.
Quienes no pueden realizarse este tratamiento:
- Mujeres embarazadas
- Personas con problemas circulatorios graves (trombosis, o enfermedades vasculares)
- Personas con problemas Cardíacos
- Personas con problemas renales
- Personas con problemas en la piel (eczemas, psoriasis o infecciones activas)
- Personas con Cancer
- Personas con trastornos hemorrágicos
- Personas con hipertensión no controlada
- Personas diabéticas no controladas
